ENFERMEDADES INFECCIOSAS
HERPESVIROSIS CANINA: El virus del herpes canino afecta vías respiratorias superiores, mucosas genitales y oculares. Causa en la camada el síndrome de mortalidad neonatal que se manifiesta en los primeros 8 días y, en el adulto, enfermedades respiratorias, infertilidad y aborto. El virus se desarrolla a temperatura inferior a 37ºC, por esto hay que tener cuidado con la hipotermia. Para el control de la enfermedad existe una vacuna que, suministrada a la perra gestante, proporciona una protección pasiva a los recién nacidos.
MOQUILLO: Es una enfermedad vírica que se manifiesta con 2 formas: una fulminante que provoca muerte inmediata y otra con síntomas poco característicos: hipertermia, secreciones nasal y ocular, dificultades respiratorias, diarrea y deshidratación y trastornos nerviosos. La tasa de mortalidad es del 80%. Es importante la vacunación entre las 7-8 semanas de vida, cuando desaparecen los anticuerpos del calostro, con revacunaciones anuales.
PARVOVIROSIS: o gastroenteritis hemorrágicas; los cachorros afectados por este virus dejan de comer, están en un estado de intensa postración con diarrea, vomito, deshidratación hasta la muerte que llega al cabo de unos días. La profilaxis se basa en la vacunación precoz de los cachorros y la desinfección de los locales y el material.
CORONAVIRUS CANINO: es una enfermedad infecciosa viral contagiosa que afecta a los perros de todas las edades, pero principalmente a los cachorros. Sus síntomas son anorexia, aumento de la temperatura a 40ºC., diarrea sanguinolenta (con moco y mal olor), vómitos, deshidratación y dolor abdominal. Estos síntomas son similares a los que se dan en la parvo virosis, pero en este caso la gastroenteritis es menos severa. Su tratamiento consiste en el uso de un sostén, aplicando antibióticos, terapia de fluidos, estimulantes del apetito, vitamina B, antiemética, antidiarreico, protectores de la mucosa intestinal y antivirales. La enfermedad es prevenida con la vacunación y con una buena higiene.
HEPATITIS INFECCIOSA CANINA: En los cachorros de entre 1 y 3 semanas de edad, esta virosis se manifiesta con postración, dolores abdominales, coma y muerte dentro de pocas horas. Los cachorros de mayor edad y los adultos presentan fiebre alta, diarrea, vomito y trastornos oculares y renales. La profilaxis se basa en la higiene y la vacunación.
TOS DE LA PERRERA: es una enfermedad transmitida por virus y bacterias. Causa tos fuerte, seca, repetitiva y poco productiva; hay una mayor repercusión en lugares con elevada densidad de perros, por esto es importante una cuidadosa desinfección de los locales, renovar continuamente el aire de los locales y respectar las pautas de vacunación.
DIARREAS INFECCIOSAS: pueden ser de origen vírico o bacteriano. Se manifestad con distintos síntomas de intensidad variable: diarrea con heces de olor nauseabundo y sanguinolento, vomito y a veces aumento de temperatura. Sólo es eficaz la prevención sanitaria (desinfección e higiene).
LEPTOSPIROSIS: es una enfermedad bacteria a menudo letal. Hay 4 formas:
- Forma fulminante: con muerte súbita sin pródromos;
- Forma sobreaguda: causa hepatitis fulminante con muerte rápida;
- Forma aguda: hipertermia, gastroenteritis hemorrágica, conjuntivitis, petequias, insuficiencia renal aguda y muerte en estado de hipotermia.
- Forma icterohemorrágica: la mas frecuente, causa vomito, postración, insuficiencia renal, coloración amarilla de las mucosas, muerte al cabo de 3-6 días.
Actualmente hay vacunas que protegen al perro frente a los serótinos mas difundido, pero se queda el riesgo de infección con otros serótinos que no estén en la vacuna administrada.
ENFERMEDADES PARASITARIAS
COCCIDIOSIS: los adultos no presentan síntomas; en los cachorros se observa disminución de apetito, la emisión de heces bien formadas, pero cubiertas de moco e incluso sangre y retraso del crecimiento. La profilaxis se basa contra la higiene y la lucha contra los roedores, que actúan como Vectores de la enfermedad.
DEMODICOSIS: es una enfermedad cutánea producida por un ácaro. Los cachorros pueden infectarse desde muy pequeño, pero los síntomas suelen manifestarse después de los 3 meses. Provoca la formación de calvas circulares alrededor de los ojos, en la comisura labial, la parte inferior del cuello y los extremos de los miembros anteriores; en la mayoría de los casos no hay prurito pero en caso que se complique y se generalice aparecen pústulas, prurito e infecciones secundarias. La profilaxis se basa sobre el control de las condiciones que favorecen la aparición de los síntomas: baños demasiado frecuentes, sustancias irritantes para la piel y corticoterapia antes del año de edad.
SARNA SARCOPTICA: es una enfermedad cutánea producida por un ácaro que puede colonizar la epidermis de todo el cuerpo. Se observa inflamación de la piel con prurito intenso y costras. La distribución de las lesiones es bastante característica: pabellones auriculares, cara inferior del cuello, puntas de los codos y de los corvejones y abdomen. Es posible la transmisión a otras especies (hombres también).
GIARDIOSIS: Es una enfermedad causada por un parásito intestinal, que afecta principalmente a los cachorros. Se observa la presencia de grasas en las heces, aumento del volumen y la frecuencia de las defecaciones, adelgazamiento y coprofagia. El desarollo del parasito se evita mediante desinfección.
TENIOSIS: es una enfermedad parasitaria intestinal, conocida comunmente como “Lombriz solitaria” y se debe a gusanos planos. A veces la infestación es asintomática: los animales pueden padecer trastornos digestivos, hipoglucemia, aumento del apetito y prurito anal (el animal trata de aliviar el prurito frotándose el ano contra el suelo). En las heces se observan segmentos blanquecinos del parasito. La infestación se produce por pulgas portadoras o por ingestión de carne de animales portadores, por esto hay que evitar alimentar los animales con carne cruda.
TOXOCAROSIS: es una parasitosis intestinal debida a gusanos planos. En los cachorros puede provocar trastornos respiratorios por migración pulmonar de las larvas y trastornos digestivo (dilatación y perforación intestinal, vomito, diarrea). Los machos adultos infestados no presentan síntomas. Las hembras al final de la gestación o durante la lactación presentan signos de malabsorción y maldigestión. Esta enfermedad es una zoonosis potencial (fenómeno de la larva migrans). Su prevención se realiza administrando un vermifugo en la perra gestante, tratando los cachorros y realizando un tratamiento sanitario de la zona de maternidad.
FILAROIDOSIS: Es una enfermedad causada por un parásito que se desarolla en las cavidades cardiacas derechas y en las arterias pulmonares. Es transmitida por picaduras de mosquitos. Los síntomas son: insuficiencia cardiaca con adelgazamiento, anemia y trastornos respiratorios. Puede occurrir muerte por fallo cardiaco o por obstrucción de un gran vaso sanguineo. El parásito también puede localizarse fuera de las cavidades cardiacas derechas y las arterias pulmonares, en cuyo caso y según la localización, hay afectación del sistema nervioso central, trastornos locomotores o lesiones cutaneas. La profilaxis se basa en la administración de un comprimido una vez al mes o una inyección anual.
LEISHMANIA: Es una enfermedad producida por un parásito localizado en primer término en macrófagos, células blancas de la sangre, vinclulados a través del torrente sanguíneo provocando lesiones en todos los órganos. Muy extendida a nivel mundial, afectando tanto al perro como al hombre existiendo una gran incidencia en los países del área mediterránea. Se transmite por picadura de mosquito.
En el perro se observan lesiones cutáneas que consisten en áreas depiladas con descamación, sobre todo en articulaciones y pliegues de la piel, pequeñas ulceraciones en nariz, mucosa bucal, pabellón auricular, dorso y salientes óseos, conjuntivitis y queratitis, crecimiento exagerado de las uñas. La evolución es crónica y muchos animales manifiestan anorexia, fiebre irregular, apatía, aumento del apetito sin aumento de peso, palidez de las mucosas.
En algunos casos hay edemas en distintas partes del cuerpo y hemorragias por las aberturas nasales. Además se encuentran afectados un gran número de órganos internos. El tratamiento existente no consigue la eliminación del parásito, únicamente evita la presencia en la sangre circulante, con lo cual disminuye el riesgo de transmisión. El único control posible, además del sacrificio del animal, es la lucha contra el vector transmisor, los mosquitos.